Compre más Ahorre más: Ahorre hasta un 25 % de descuento
✈️ ¡Envío gratis a todo el mundo!

¿Qué es el trastorno del sueño por insomnio?

El insomnio es un trastorno del sueño caracterizado por la dificultad para conciliar y permanecer dormido. Casi una de cada diez personas se enfrenta al menos a un episodio de insomnio leve en algún momento de su vida. Esta condición es especialmente más común entre mujeres y personas mayores.

El insomnio puede incluir:

  • dificultades para conciliar el sueño.
  • Dificultad para volver a dormirse una vez despierto
  • Despertarse demasiado temprano.

A veces las personas pueden experimentar los tres.

Es posible que sienta insomnio por un breve período, como cuando está ansioso o agitado. Esta condición se caracteriza como insomnio agudo. Por otro lado, el trastorno de insomnio crónico es un término utilizado para describir el insomnio prolongado. Este se caracteriza por tener dificultad para conciliar o permanecer dormido al menos tres noches por semana durante al menos tres meses, así como no funcionar con normalidad durante el día.

Tipos de trastornos del sueño

Además del insomnio, existen más de 80 tipos distintos de trastornos del sueño. Los más frecuentes son:

Apnea obstructiva del sueño: se caracteriza por ronquidos y breves periodos de falta de respiración durante el sueño.

Síndrome de piernas inquietas : esta condición ocurre cuando sientes la necesidad de mover las piernas cuando estás en reposo.

Trastorno del sueño por trabajo por turnos: Implica tener problemas con el sueño. Tener dificultad para conciliar el sueño y permanecer dormido, y sentirse cansado en momentos inoportunos debido a su horario de trabajo.

Narcolepsia: No puedes controlar cuánto tiempo permaneces despierto o cuándo te duermes.
Trastorno de conducta del sueño REM: implica representar sueños durante el período REM del sueño.

Síndrome de la fase retrasada del sueño: es una afección en la que las personas experimentan dificultades para conciliar el sueño a la hora deseada y luchan por despertarse a tiempo para ir al trabajo o la escuela.

Relación entre ansiedad y trastorno del sueño

Se sabe desde hace mucho tiempo que los trastornos graves del sueño , en particular el insomnio, son un signo de trastornos de ansiedad. Las personas ansiosas suelen pensar en sus preocupaciones en la cama, lo que puede impedirles conciliar el sueño.

El insomnio se ha relacionado con un estado de hiperactivación mental que frecuentemente va acompañado de preocupación. Las personas que padecen trastornos de ansiedad muestran una mayor capacidad de respuesta al sueño, lo que sugiere que son más propensos a experimentar insomnio durante situaciones estresantes.

Las personas que padecen numerosos tipos de ansiedad, como el trastorno obsesivo-compulsivo, el trastorno de estrés postraumático y el trastorno de ansiedad generalizada, han informado de dificultades para dormir.

El estrés por quedarse dormido puede causar ansiedad durante el sueño, lo que hace que una persona se sienta aún peor por su miedo. La ansiedad por ir a la cama, que también se conoce como ansiedad anticipatoria, puede alterar los buenos patrones y rutinas de sueño.

Los investigadores han descubierto que preocuparse y reflexionar antes de acostarse puede dificultar tener sueños animados durante el sueño de movimientos oculares rápidos (REM). La ansiedad puede provocar sueños y pesadillas aterradoras, que pueden dificultar el conciliar el sueño y provocar aún más miedo a conciliar el sueño.

¿Por qué me pongo ansioso por la noche y no puedo dormir?

Es posible que nos sintamos más ansiosos por la noche porque tendemos a concentrarnos más en nuestras ansiedades cuando estamos acostados en la cama sin distracciones del día. Esta concentración constante en pensamientos ansiosos durante la noche nos impide dormir. Por ejemplo, las personas que sufren de insomnio pueden empezar a preocuparse por su capacidad para conciliar el sueño. Estas preocupaciones pueden empeorar el insomnio y dificultar aún más la capacidad de conciliar el sueño.

Además, la ansiedad puede ser causada por una variedad de condiciones diferentes que se manifiestan durante la noche. Por ejemplo, las personas con trastorno de pesadillas frecuentemente experimentan angustia cuando se despiertan de una pesadilla. Las pesadillas y los trastornos del sueño también son síntomas del trastorno de estrés postraumático (TEPT). Además, experimentar episodios de pánico durante la noche puede hacer que las personas se despierten sintiéndose ansiosas y esperando algo terrible. Estas condiciones, si no se tratan, hacen que la persona no pueda dormir.

Es común que una persona con trastorno de ansiedad tenga problemas para conciliar el sueño o permanecer dormido. Esto se debe a que la ansiedad puede desencadenar la respuesta del cuerpo al estrés. Esta respuesta al estrés inicia una cascada de eventos que pueden hacer que una persona esté demasiado agitada o cansada para conciliar el sueño.

Además, el cuerpo puede verse impactado por la ansiedad incluso durante el sueño, provocando cambios en las etapas del sueño. Por ejemplo, se descubrió que las personas que tienden a estar más ansiosas tenían períodos más cortos de sueño con movimientos oculares rápidos. La ansiedad también se asocia con una disminución del sueño profundo, que se cree que es esencial para la curación del cuerpo y la mente.

Cómo aliviar o tratar

El estrés, la ansiedad y el sueño están conectados en un círculo vicioso. Cuando estamos estresados ​​o ansiosos, nuestro cuerpo produce cortisol, que es una hormona que nos impide dormir manteniéndonos despiertos. Puede provocar pensamientos inquietos y músculos tensos que dificultan conciliar el sueño y permanecer en la cama. Por otro lado, la falta de sueño altera nuestra capacidad para afrontar eficazmente el estrés y la ansiedad. La falta de sueño provoca una regulación emocional, lo que nos vuelve más irritables y negativos, e interfiere con la concentración, lo que dificulta afrontar los retos.

Existe una amplia gama de alternativas de tratamiento para abordar diversos trastornos del sueño, que pueden comprender:

  • Establezca una rutina relajante antes de dormir para indicarle a su cuerpo que es hora de relajarse. Esto podría incluir actividades como leer o tomar un baño tibio.
  • Tomar medicamentos o suplementos (por ejemplo, zolpidem, zaleplon) para el insomnio.
  • Terapia de conducta cognitiva. Este tipo de terapia puede resultar muy eficaz para tratar el insomnio crónico y mejorar los patrones de sueño.
  • La luz azul que emiten las pantallas puede interferir con tu capacidad para conciliar el sueño. Limite el tiempo frente a la pantalla al menos una hora antes de acostarse. Puedes utilizar velas o iluminación ambiental en lugar de pantallas electrónicas.
  • Evite la cafeína y la nicotina cerca de la hora de acostarse, ya que pueden interferir con su capacidad para conciliar el sueño.

Su profesional de la salud le hará recomendaciones de terapia basadas en su condición específica. También repasarán los posibles efectos secundarios antes de comenzar la terapia.

Post anterior Siguiente post

Deja un comentario

Por favor, ten en cuenta que los comentarios deben ser aprobados antes de ser publicados